Adelantamientos
El adelantamiento, es una de las maniobras más peligrosas, delicadas y complejas, porque se altera el orden normal de la circulación , pues se invade la parte de la calzada destinada al sentido contrario y requiere una valoración rápida de la distancia y la velocidad del vehículo que viene de frente, y del espacio disponible para ejecutarlo, y todo ello en un tiempo muy corto. Por lo tanto exige además de prudencia, una decisión rápida y acertada, además de una ejecución precisa y sin vacilaciones.
Técnicamente la acción de adelantar se divide en cuatro fases complejas integradas, a su vez, por varios procesos de decisión:
FASE DE APROXIMACIÓN
- Observación y análisis del tráfico y sus características (posición, distancia, peligros ...) para lograr una anticipación adecuada y prever como evolucionarán tales situaciones.
FASE DE PREPARACIÓN
- Situarse respecto al vehículo precedente a la separación adecuada, ni muy cerca (reduce campo de visión), ni muy lejos (la maniobra se prolonga demasiado).
- Evaluación de la velocidad y la potencia del vehículo que se conduce, del que viene de frente y del que se va a rebasar, seleccionando la marcha más adecuada, siempre y cuando no rebase los máximos permitidos y no esté prohibido.
FASE DE EJECUCIÓN
- Observación por si hubiese algún vehículo que ya hubiese iniciado la maniobra. Señalización con el indicador de dirección.
- Desplazamiento al carril izquierdo. Durante la noche cuando ambos vehículos, circulen en paralelo, es el momento de hacer el intercambio de la luz de cruce por la de carretera. En adelantamiento a vehículos de dos ruedas, es preciso dejar una distancia lateral mínima de 1,5 metros.
FASE DE TERMINACIÓN
- Reincorporarse al carril de la derecha sin obstaculizar la marcha del vehículo adelantado, de forma progresiva y sin brusquedad, señalizándola con el intermitente derecho.